Una clase de filosofía. Un número stand-up. Un documental doblado en Telefe. Una exposición oral de los alumnxs de 4°B. Un biodrama. Una rascada. Todo esto y mucho más podría describir el espectáculo con dirección de Gustavo Tarrío que se presenta los viernes en el Teatro del Pueblo.

“Erase una vez… el hombre” es el nombre de la revista que inspira este espectáculo. Se distribuía en los años ‘80 en la República Argentina en fascículos coleccionables. Basada en una serie de televisión animada francesa, la revista pretendía explicar, nada más y nada menos, que la historia de la humanidad. Pero esto no termina acá: corría la última dictadura cívico-militar y la Iglesia Católica, censurando la serie original francesa por tener una perspectiva evolucionista, hizo algunos pequeños grandes cambios. Entonces, lo que era una publicación de historia devino en un cuadernillo de catecismo: el origen del hombre combinaba el creacionismo con neandertales y sapiens.

Por suerte, otra fuente de inspiración origina también esta obra: “Sapiens. De animales a dioses: Una breve historia de la humanidad” de Yuval Noah Harari, un historiador israelí que se propone contestar científicamente la pregunta sobre el origen de la humanidad. Gracias a ella, la obra hace un repaso del pasaje de los “homo” prehistóricos hasta los sapiens, de los cazadores recolectores a la revolución agrícola y al monocultivo, de la religión politeísta a la monoteísta y luego al capitalismo.   

Todo esto aborda “Erase” y lo hace de la única manera en que puede hacerse: con total falta de respeto.

Seis actuantes encarnan esta locura que mezcla discusiones filosóficas, canciones, números de danza, monólogos, lecciones de historia. Abordan las teorías sobre la definición de la humanidad, pasando por Linneo, Aristóteles, Marx y Engels, Levi-Strauss, Freud, Hobbes, Locke, Rousseau, Foucault, Arent, Descartes, Chomsky, etc, etc. Cuentan anécdotas personales de lo más insignificantes y se bailan todo al ritmo de Gershwin, con movimientos que recuerdan tanto a Hanna & Barbera como a la era dorada de Hollywood.

La voz en off de Gustavo Di Sarro, cual narrador de “La aventura del hombre”, irá relatando la evolución de la especie con actuaciones literales, infantiles y exquisitas que, en tono clownesco, nos llevarán desde la historia del último neandertal extinguido por los sapiens, a la creación de las ficciones míticas que nos permiten reconocernos como comunidad; desde las andanzas de lxs cazadores-recolectores hasta las aventuras del “señorito trigo” y su capacidad de domesticarnos.

No conforme con esto, el espectáculo también hace eco de la historia del pensamiento feminista, donde presenciamos un fantástico monólogo de Mónica Cabrera que, tomando la voz de Rita Segato, nos da cátedra sobre todo lo que sale mal en nuestra evolución y cuya dialectica es desintegrada por el típico machito violento (bellamente pareodeado por ella misma).

La puesta en escena se forma a partir de cuadros autónomos o fascículos que no tienen otro objetivo que el de promover el juego actoral, buscando las 1000 maneras de contar nuestra historia, tomando la fuerte premisa de que la historia humana es la historia de los genocidios. El modo de montaje es caprichoso y lúdico, con notables saltos que obligan a lx espectadorx a elegir su propia aventura. La cabeza de Yuval Noah Harari rodará por todo el espacio, en un estado de sagrada omnipresencia.

En esta temporada, “Erase…” cumple con su destino, ya que se presenta en el Teatro del Pueblo donde tenía prometido su estreno el 20 de Marzo del 2020. Anteriormente, cuando se liberaron algunas restricciones por la pandemia, realizó funciones en Quetren quetren, una cancha tomada por mujeres que funciona como centro cultural. Allí el montaje tuvo la obligación de re-pensarse como un espectáculo de recorrido, lo cual habrá tenido su encanto.

Esta humilde reseña no llega a hacerle honor a este espectáculo, que pone a lx espectadrx en la incómoda situación de encontrarse riéndose de las zonas más oscuras de nuestra historia como especie; que muestra, escapándole con maestría a la solemnidad (que tan mal le hace al teatro), una crítica aguda y muy bien argumentada al sistema capitalista heteropatriarcal.

Tienen tiempo de verla hasta el 24 de Junio, no se la pierdan.

Autoría: Mónica Cabrera, Marcos Krivocapich, Gustavo Tarrío

Actúan: Mónica Cabrera, Marcos Krivocapich, Nico Levin, Carolina Saade, Donna Tefa Sanguinetti, Denisse Van Der Ploeg

Dirección: Gustavo Tarrío