Las estrellas nunca mueren
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Las estrellas nunca mueren

Cris Miró, orgasmo apocalíptico de Jorgelina Eva Belardo es una remake y un homenaje a la figura de la mítica actriz trans que irrumpió en los neoliberales años 90s y que sigue siendo un faro para la comunidad Lgtbiq+.

17 de noviembre de 2022

La obra, estrenada en octubre en la calle Corrientes, había sido realizada en 1985 e implicó el debut teatral de Cris Miró. En ese entonces, hace 37 años, no había conseguido que espacios teatrales tradicionales quisieran albergarla. Un tiempo después de esta experiencia, Miró fue convocada para actuar en el Teatro Maipo donde realizó, en 1995 junto con Lino Patalano, Viva la Revista. Con Orgasmo apocalíptico, despegaba la carrera artística de Miró quien sería luego recordada como una de las referentes travestis más importantes de fines del siglo pasado.

La versión que se puede ver actualmente en el Multiescena es una reposición de aquella obra. Cuenta con la producción de Esteban Costa, fotógrafo de Miró. Belardo, formada en la escuela de Alejandra Boero y quien había sido bailarina de la obra en 1985, oficia al modo de una maestra de ceremonias que compone el prólogo y epílogo del espectáculo. Se encarga de contextualizar el proyecto artístico y ponerlo en relación con los reclamos de la comunidad sexo-género disidente, en general, y de las personas travestis y trans, en particular. Luego de darnos la bienvenida, vemos a cuatro bailarines y a Joel Castañeda, quien encarna el papel que hizo, en su momento, Miró.

El espectáculo se presenta como una sucesión de números musicales con una fuerte carga erótica. Les cinco performers despliegan virtuosismo y sensualidad a cada momento. A su vez, se trabaja en torno al encuentro amoroso de los cuerpos desde un lugar que erosiona las categorías de la heterocisnorma: sus cuerpos y deseos desbordan las categorías binarias. La propuesta escénica cuenta con juegos de luces, cambios de vestuario y un gran elenco. Las personas se muestran y nos seducen al modo de un cabaret. Se suma el hecho de que los vestidos son los originales que usó Miró y que vemos fotografías de Costa de la puesta realizada en 1985.

Este espectáculo es parte de una trilogía que se compone también de la edición de un libro, que saldrá el año próximo, y la realización de una muestra fotográfica. Belardo, en un artículo que escribió con Costa, “Cris Miró: Trilogía de la diversidad sexual”, concibe a este tríptico, pensado en torno a la identidad de género, los derechos y la vida artística, como un homenaje a la memoria de Miró. Parte del modo en que Belardo la recuerda también puede verse en el cortometraje documental Mi derecho. Entrevista a Jorgelina Belardo de 2011.

Cris Miró, orgasmo apocalíptico se presenta como una invocación a una artista cuyo recorrido por la escena under de los 80 y su popularidad en la década siguiente marcaron la historia de la comunidad sexo-género disidente. Fue una actriz, bailarina, estudiante avanzada de Odontología y la primera travesti en tener una presencia resonante en los medios de comunicación. Su paso por el teatro de revistas abrió caminos. La obra de Belardo se presenta como un amoroso homenaje que reivindica su figura y nos permite imaginarnos, por un rato, a Miró sobre el escenario como una manera de mantener con vida su legado.

Por Agustina Trupia

 

Cris Miró, orgasmo apocalíptico

jueves a las 20:30hs

Multiescena Av. Corrientes 1764.

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