La boda de la hija del presidente es una comedia que me resultó muy divertida e ingeniosa. La escena tiene lugar en un casamiento. Sin embargo, ese no es el verdadero tema. Los invitados a la celebración son políticos, funcionarios, representantes de la iglesia, artistas y, claro, algunos familiares. También están presentes los mozos y las cocineras. Es una parodia de lo que puede llegar a pasar en esas fiestas a las que los ciudadanos no accedemos. Los personajes están alejados de la felicidad de los nuevos conyuges. Lo que sostiene a la obra es el humor político y el gran ritmo con el que se generan hilarantes situaciones.
Vi esta propuesta en una temporada anterior y, ahora, celebro que llegue a la Avenida Corrientes. Es un espectáculo lleno de vitalidad, humor e ideas que puede ser disfrutado por una gran cantidad y variedad de públicos y que esté en un teatro comercial los acerca. La trama está construida con muchísimos guiños que generan una complicidad, casi inmediata, con el espectador. Creo que es porque tiene la virtud de reconocer aspectos que son parte de la realidad y volcarlos en escena con gran rigor e imaginación, desde el punto de vista de la dirección, de Adrián Cardoso. El equipo se completa con los actores Cristian Sabaz, Ariel Gangemi, Miguel Haddad, Diego Blanco, Juan Manuel Cereghini y el músico Alejandro Weber. Todos tienen una gran entrega y virtuosismo para interpretar la pieza que, originalmente, fue escrita por Juan Mayorga y Juan Cavestany. Me resultó muy divertida y creativa. La recomiendo.
Por Ingrid Pelicori
Estreno: 29 de marzo a las 20.30hs
Funciones: miércoles 20.30hs
Paseo La Plaza Av. Corrientes 1660
Autoría: Juan Cavestany, Juan Mayorga / Actúan: Diego Blanco, Juan Manuel Cereghini, Ariel Gangemi, Miguel Haddad, Cristian Sabaz / Músico: Alejandro Weber/ Coreografía: Marina Svartzman/ Dirección: Adrián Cardoso